Jueces

Cuando vosotros juzgáis a un acusado por robo, señores magistrados, no le preguntáis cuánto tiempo lleva sin trabajo, cuántos hijos tiene, qué días de la semana comió y qué días no comió, no os preocupáis en absoluto por las condiciones sociales del medio donde vive: lo enviáis a la cárcel sin más contemplaciones. Allí no van los ricos que queman almacenes y tiendas para cobrar las pólizas de seguro, aunque se quemen también algunos seres humanos, porque tienen dinero de sobra para pagar abogados y sobornar magistrados. Enviáis a la cárcel al infeliz que roba por hambre, pero ninguno de los cientos de ladrones que han robado millones al Estado durmió nunca una noche tras las rejas: cenáis con ellos a fin de año en algún lugar aristocrático y tienen vuestro respeto.

- Fidel Castro, tomado de "La Historia me absolverá"

Difícil

Un amigo me contó que cuando le gusta una muchacha y no se atreve a ir a la conquista directamente ( cosa que pasa con frecuencia porque mi amigo es muy tímido) utiliza la estrategia de “hacerse el difícil”. Su técnica consiste, según me ha contado, en llamar la atención de la individua que le interesa y después ignorarla hasta que la curiosidad generada en ella (es ahí cuando se convierte en una “gata”) la lleve a tomar la ofensiva en la conquista. Lo valioso de la maniobra es que si la individua no cae presa de la curiosidad, las intenciones del frustrado conquistador no necesariamente quedan descubiertas.

Ahora bien, aplicada la teoría anterior a las ciencias naturales y la salud pública, ¿será capaz de lograr que la pandemia porcina caiga rendida a los pies del gobierno?

Seguramente el tiempo dirá...antes que el Departamento de Salud.

Culto

La voz en la calle es que si uno hace una iglesia el flujo de dinero será una de varias bendiciones colaterales. Se pregona, del mismo modo, que la libertad de culto permite que hagamos cosas so color de nuestra fe que a los simples mortales les pueden estar vedadas.

Para el Tribunal Supremo “la libertad de culto escrita en nuestra Constitución patrimonio del ser racional y derecho inalienable del hombre a cumplir lo que crea ser su obligación de conciencia ante el misterio de la vida”...

Ante tal cuadro, hermanos y hermanas, propongo fundar la Iglesia de la Divina Cerveza Fría, cimentados en un dogmatismo ortodoxo de cumplir cabalmente ese mandamiento que Dios nos mandó directamente mediante Moisés y que nos impone la obligación de Santificar las Fiestas. Nuestro culto no será uno protestante sino de unión, en el cual se descansará el domingo pues los miércoles, jueves, viernes y sábados serán noches y días de comunión. De madrugadas de compartir el vino y el pan que viene en lo alto de la barita del milagroso pincho.

Santificando las fiestas nos santificamos nosotros mismos. Es justo y necesario, es nuestro deber y salvación alejarnos de esos caminos trazados por Satanás para distraer las juventudes que sumergidos en su pecado únicamente socializan mediante sus aparatos electrónicos. Así nos ayude dios...a vencer los códigos de orden público y otros sacrilegios análogos.

Ninja

que no te duerman con cuentos de hadas,

que no te cierren el bar de la esquina.

- Sabina

La manipulación mediática y la fabricación de “issues” utilizada por el gobierno de Fortuño es llamada por algunos expertos del tema como la estrategia de la bolita de humo. La milenaria táctica heredada directamente de los Ninja o Shinobi consiste en generar humo a través de ignición de manera que la nube que se crea ciegue al adversario, dándole así tiempo suficiente al Ninja para escapar.

La primera bolita de humo que nos tiro Fortuño, por lo menos en el sentido figurado, fue la del impuesto al celular. La medida era tan antipática que ayudó a aguar el debate y a distraer la opinión pública cuando despidieron a decenas de miles de empleados. Como esa hay muchas más y quien dude esa afirmación no escucha suficiente radio AM.

Esta semana el gobierno, cansado de las metáforas, decidió tirar bolitas de humo en Río Piedras. Parece que la fulminante botada que le dieron a García Padilla no era suficiente y decidieron ir contra los estudiantes. Y es que decir estudiante viene siendo como decir delincuente. Eso de estar bebiendo, de estar fuera de sus casas, de querer socializar, de usar los espacios públicos en la ciudad universitaria es una afrenta directa a los valores del nuevo hombre puertorriqueño que Fortuño quiere.

Ante todo eso lo que nos queda es el llamado a la organización en todos los espacios posibles y los no tan posibles y levantar la consigna de ¡A ESTUDIAR Y A LUCHAR!

Una foto

Una foto de Cuba en lo que escribo algo que valga la pena publicar aquí.